De vez en cuando, en la gestión interna de InterMèdia usamos metáforas o analogías prestadas del fútbol y, más concretamente, del Barça, que es el equipo más grande y cercano que tenemos. Hablamos de mantener la tensión, de no dar un balón por perdido, de no hartarnos de pelota, de darlo todo en el terreno de juego, de tener presente que para ganar la liga hay que jugar bien en todos los estadios, tanto grandes como pequeños, y sobre todo, de confiar siempre en los compañeros, sabiendo que estarán atentos y dispuestos a acompañarte solidariamente durante toda la jugada. Porque ya sabemos que hacer un gol no depende nunca de un solo jugador sino de todo el equipo, que colabora desde diferentes posiciones.
Ahora, tras una época gloriosa que pasará a la historia, el Barça ha perdido un par de partidos importantes, pero ayer ganó otro -bastante decisivo- gracias a la aparición de un líder que se esfuerza por obtener victorias colectivas.
Este mes de mayo InterMèdia estrena nuevo director general, un hombre franco y directo que llega cargado de conocimientos, proyectos e ilusiones profesionales, tanto personales como colectivas.
Bienvenido a casa, Albert!